Hoy nos gustaría hablar de un bello paraje natural cercano a nuestro pueblo, aprovechando su cercanía con Torremocha del Pinar. Se trata de la Virgen de Montesinos que se halla en medio del Alto Tajo, la conoces? Pues deberías!
La ermita se encuentra enclavada a unos cuatro kilómetros de Cobeta. Se trata de un gran edificio del que destaca su puerta adintelada, con fornidos hierros, en forma de arco de medio punto formado por grandes dovelas. Además, dentro de la ermita se conservan un buen número de recuerdos marianos, muestra de la devoción a la virgen a la que rodea una milagrosa leyenda. Tras el famoso episodio se levantó el templo como señal de advocación a Nuestra Señora de Montesinos. Frente a la ermita, se halla la casa del santero. Elementos, todos ellos, que conforman un conjunto de arquitectura tradicional envuelto por la belleza del paraje natural.
Según la tradición, la Virgen se apareció a un pastorcilla manca que buscaba por los parajes donde se levanta el santuario una vaca que había perdido. La Virgen le aseguró a la pastorcilla que por su intersección hallaría al animal, encargándole además que fuese al Castillo de Alpetea que se encontraba al mando del moro Montesinos el cual asolaba aquellas tierras con crueldad. Para convencer al moro, la Virgen le repuso la mano perdida poniendo sobre la misma la señal de la cruz. Visto el milagro, Montesinos se convirtió al cristianismo, bautizándose en el lugar donde se había producido la aparición mariana.
La ermita es una de las más antiguas de la zona de Molina de Aragón. Sin embargo, nada queda de su edificio primitivo. Fue reconstruida en el siglo XVI por Diego López de Zúñiga, aunque tampoco coincide con la imagen presentada en la actualidad.
Atribuye la historia popular los restos aparecidos en los alrededores de la ermita, entre los que se encontraron vasijas quebradas y algún esqueleto varios de ellos de gran tamaño, al moro Montesinos, quién mostró continuado fervor por la virgen desde ocurrido el milagro.
Para acceder a este maravilloso entorno se puede hacer también desde Corduente, tomando la pista señalizada que discurre paralela a las aguas del Arandilla, o desde Torremocha del Pinar, y dejar los vehículos en el aparcamiento que hay a los pies de la ermita. Aunque lo más recomendable sería dejar el coche en alguna de las localidades cercanas y realizar la ruta hasta la ermita a pie, para poder disfrutar en estado puro del paisaje de esta parte del Señorío de Molina.
Cada tercer sábado de mayo, los vecinos de Cobeta, la Olmeda, Torremocha, Torrecillas, Selas, Anquela y Aragoncillo se unen en alegre romería. Celebrada en honor a la Virgen de Montesinos, a esta romería también se la conoce como fiesta de las Siete Banderas, debido a que cada uno de los pueblos acudía a la romería representado por su cruz y su estandarte.
Desde por la mañana, van llegando a la ermita los primeros vecinos. Tras la misa y la procesión, en la que la virgen es sacada en andas desde la ermita y llevada alrededor de la misma, los actos religiosos se celebran entre las 11.00 hasta el mediodía, los allí congregados disfrutan de una buena comida rodeados de un bello entorno natural, refrescado por las aguas del río Arandilla, con muy buena fama en cuanto a sus aguas entre los habitantes de la zona, y en el que las altas rocas de arenisca rojiza contrastan con la exuberante vegetación del valle.
Declarada como fiesta de interés turístico provincial de Guadalajara, a la romería acuden cada año a poner velas y adornar a la virgen con flores los habitantes de estas localidades cercanas a Cobeta, término en el que se levanta la ermita. Aunque no es lo habitual en estas celebraciones religiosas, en esta romería los devotos de la Virgen de Montesinos no subastan los palos ni realizan ofrendas.
Esperamos que esto os anime a visitar este bello paraje!
0 comentarios:
Publicar un comentario