Jueves Lardero es el nombre con el que se conoce en diversas partes de España al jueves en que comienza el Carnaval, y que en otros lugares se conoce como día de la tortilla o día de la mona. En Luzón si que se celebraba, y sabemos de buena tinta, que aún muchos luzoneros lo siguen celebrando en sus casas.
Y es que la propia celebración del Carnaval, fuese cual fuese el origen remoto de la palabra y de la fiesta, se convirtió en la fiesta de despedida de la carne. De ahí que antiguamente, nuestros antepasados procurasen gozar de ella todo lo posible en esos días; no sólo porque iban a seguir 40 días en los que la religión les iba a prohibir catar la carne, sino también para desquitarse de los largos ayunos de carne que la pobreza les imponía durante todo el año.
Y bien, entrando en la materia prima de la fiesta, que era la carne, se instituyó en la versión de extensión media del Carnaval (la de una semana), el Jueves Lardero, inventado ni más ni menos que para iniciar solemnemente la tanda de días en que había que aprovechar para hartarse de carne, a fin de no echarla en falta durante la inminente Cuaresma.
Lardero es un adjetivo procedente del antiguo lardo, que es el tocino o gordo (que así se llama también el sebo o manteca del animal), es decir, la grasa. No perdamos de vista que al fin y al cabo se refiere a la parte menos valiosa del animal, con la que sin embargo nuestras abuelas eran capaces de hacer auténticas maravillas culinarias. Procede del latín lardum o lardium, palabra con la que los romanos denominaban el tocino y la manteca de cerdo. Ahora bien, el significado usual de tocino es el de carne gorda (con grasa) del cerdo; carne en fin de cuentas, con lo que vino a ser sinónimo de carne de cerdo.
Y esto era lo que en especial caracterizaba al Jueves Lardero, el abundante consumo de esta carne o de sus productos secundarios. En Luzón era típico comer una buena tortilla de patata con chorizo o lomo de los que se guardaban en aceite... qué te parece? Tú lo celebras? Qué es la comida que preparas???
2 comentarios:
En Anguita se iba al castro celtibérico de los Castillejos con un bocata de tallo. y más recientemente, se hacía una chocolatada en la nave de Vicentito.
Ayer no pude por más que recordarlo y echar mano de los choricicos de matanza en aceite y en crudo y acompañados de un buen pan, hacer honor al día.
¡¡Saludos a tod@s!!.
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