Ayuntamiento - edificio

Queremos empezar con este post, un recorrido por los monumentos y edificios más destacados de nuestra localidad. Para ello, empezaremos por el Ayuntamiento.

Está en la Plaza Mayor, presidiéndola junto con la Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol que se halla a su lado. Al otro lado, se encuentra el edificio de la Asociación Amigos de Luzón y enfrente el "frontón".

Es una casona que en los últimos años se ha visto rehabilitada, tanto en su interior como en la fachada. Está construida a base de piedra sillar en su parte inferior y en sillarejo con abundante argamasa en la superior.

Su fachada se encuentra adornada con la placa fechada el 10 de Septiembre de 1978, colocada por el Ayuntamiento de Luzón y la Casa de Guadalajara en Madrid, en la que se recuerda a D. Francisco Layna Serrano, hijo del pueblo. Así mismo, ahora hay sendos carteles que sirven para señalar el Bar y el Consultorio médico, como también hay un corcho para los anuncios y noticias importantes.

El edificio, cuenta con 3 plantas. En la planta baja es donde se hallan las dependencias de uso más común o público, como es el bar y el consultorio médico. Y ya en la planta del medio es donde están las dependencias más puramente propias del consistorio: despacho, salón de plenos y biblioteca. La última planta, no tiene un uso claro.

La planta baja en el pasado, tuvó un uso muy distinto, ya que en la zona ocupada hoy por el consultorio médico y los servicios del bar, se encontraba el calabozo de la villa, donde más de uno estuvó preso. Con la remodelación de la planta baja, desapareció para que se creará el bar del pueblo (arrendado al ayuntamiento) y la sala donde el médico pudiese atender en condiciones a los pacientes del pueblo.

Asi mismo, hasta no hace tanto tiempo (antes de la creación del bar), la parte trasera de la planta baja, se usó por parte de la Asociación para poner allí la barra de las fiestas, cuántas risas se habrán echado allí!

La última mejora, ha sido arreglar la planta del medio así como el tejado, y de paso dotar de calefacción a todo el edificio, lo cual es de agradecer teniendo en cuenta el clima de la zona.

Lo que esperamos y deseamos, es que con el tiempo, los numerosos y valiosos libros que se encuentran en una de sus salas en un estado más que lamentable, puedan ocupar el sitio que les corresponde así como disfrutar de unos cuidados mínimos, antes que la humedad y el abandono hagan mella definitiva en ellos.